El atacante neerlandés ha marcado en los tres últimos partidos y los goles han sido importantes
Luuk de Jong ha vuelto a marcar. Y ya van tres partidos consecutivos en los que el atacante neerlandés ve puerta y resulta decisivo en el juego de Xavi y en el marcador culé. El ex del Sevilla, cuyo fichaje le supuso a Koeman un buen número de críticas, está resultando clave para el técnico de Terrassa.
Luuk de Jong protagonizó el cierre de mercado de verano. El Barcelona confirmó su incorporación de madrugada el último día de plazo. Llegaba al Camp Nou en calidad de cedido por el club del Sánchez Pizjuán aunque el Barça se guardaba una opción de compra. Su fichaje fue muy criticado por buena parte del barcelonismo porque implicaba la firma de un delantero que se alejaba del fútbol de toque y preciosista culé. Pero Koeman pidió expresamente su llegada porque creía que su juego aéreo podía resultar de gran ayuda al Barça. Le consideró una alternativa necesaria al resto de hombres de ataque de los que disponía.
«En un centro, Luuk es más peligroso que Neymar», aseguró el exjugador en una entrevista. «Es un tipo de atacante diferente al nuestro y creo que todos los equipos deberían tener esa clase de delantero», insistió Koeman.
Con el preparador neerlandés, participó en 9 encuentros y marcó un tanto, contra el Levante. Con Xavi, en cambio, ya suma seis partidos y tres goles. Ha visto puerta en los tres últimos choques del Barcelona, en los que, además, ha sido titular. Rubricó el gol del triunfo contra el Mallorca, el único del Barça en el empate contra el Granada y esta noche en Arabia Saudí ha superado a Courtois para poner las tablas en el marcador tras la diana de Vinicius. El atacante ha sido sustituido en el minuto 66: en su lugar ha entrado Ansu Fati.
Mercado
Luuk de Jong, que llegó al Sevilla en 2019, es uno de los nombres que la Dirección Deportiva considera prescindible. El Cádiz, de hecho, ya ha tanteado su incorporación para este mercado. Su salida parecía decidida. Así era, al menos, hasta hace unas semanas. Xavi está confiando en él. En la semifinal de la Supercopa contra el Real Madrid le ha puesto de inicio y ha sentado a Memphis.